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Patricia Castillo

Salome una Madre de Fe con una Demanda Especial

Palabra del Día: Demandar

Pedir con autoridad; requerir; buscar o reclamar algo que se debe por derecho.

Salomé era la esposa de Zebedeo y, la madre de Santiago y Juan (sus discípulos). Su esposo era un hombre rico y pescador de Galilea. Esta era una dama que se enorgullecía de sus hijos y también puede ser descrita como una mamá oso. Su nombre significa paz, y ella se encuentra en la lista de damas fieles que sirvieron al Señor durante su ministerio aquí en la Tierra.


Mateo 20:20

Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, postrándose ante él y pidiéndole algo.

Esta dama era un tipo de madre que traía a sus hijos a la iglesia. Toda su familia servía al Señor. Sus hijos eran parte del círculo íntimo de Jesús y estaban entre los dedicados a seguirle. Salomé también estuvo cuando el Señor fue crucificado, y ayudó a preparar las especias para ungirlo.


Marcos 15:40

También había algunas mujeres mirando de lejos, entre las cuales estaban María Magdalena, María la madre de Jacobo el menor y de José, y Salomé,


Marcos 16:1

Cuando pasó el día de reposo, María Magdalena, María la madre de Jacobo, y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle.


La Biblia también la describe como una mujer ambiciosa. Por supuesto, ella quería lo mejor para sus hijos; y quién no especialmente cuando tienen esa relación directa con el Señor. Debido a que tenía una relación cercana con el Señor, tuvo la audacia de preguntarle si sus dos hijos podían sentarse a cada lado de Él en Su Reino. Por favor, no se apresuren a juzgarla, por esta acción, ella nos está demostrando que tenía fe en Su Reino.


Mateo 20:20–21

20 Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, postrándose ante él y pidiéndole algo.

21 El le dijo: ¿Qué quieres? Ella le dijo: Ordena que en tu reino se sienten estos dos hijos míos, el uno a tu derecha, y el otro a tu izquierda.

Salomé sabía que ella era una madre honrada. Sus hijos servían al Señor de señores y ella se enorgullecía de ese hecho. El Señor no rechazó su pedido, sino que la corrigió con gracia y verdad. Esto es lo que el Señor le dijo: Mateo 20:22 No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo he de beber? ... Juan y Santiago tendrían que compartir el trono de los sufrimientos con Él. Lo bueno es que lo aceptaron al convertirse en sus discípulos.


Mateo 20:22

Entonces Jesús respondiendo, dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo he de beber, y ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado? Y ellos le dijeron: Podemos.


Sus hijos se convirtieron en grandes líderes del Nuevo Testamento. No solo se convirtieron en seguidores de Cristo, sino que también murieron por Su causa.

Juan: Era un pescador que se convirtió en el apóstol más joven, durante la Última Cena; él se sentó al lado de Cristo. Fue el discípulo amado, autor de 5 libros del Nuevo Testamento que fueron: El Evangelio de Juan, I de Juan, II de Juan, III de Juan y el libro de Apocalipsis.


Santiago: Era el hermano mayor y, por supuesto, también era pescador. Se convirtió en el segundo mártir cristiano. No podemos atribuir que escribió el Libro de Santiago debido a su muerte a una temprana edad.

Conclusión: Lo que aprendemos de Salomé es que ella había influenciado a sus hijos a seguir al Señor. Vemos que su ambición era carnal, pero eso también significaba que tenía fe en que un día sus hijos iban a estar en el cielo con el Señor. El papel de ser madre es enorme, pero también es un privilegio que se le da a una mujer. Él nos da la capacidad no solo de nutrirlos sino también de prepararlos para Su gloria.



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